La Comisión de los Estados Unidos para la Libertad Religiosa Internacional (USCIRF) pide rendición de cuentas internacional en el segundo aniversario del asesinato de Mahsa Zhina Amini
Washington, DC – La Comisión de
los Estados Unidos para la Libertad Religiosa Internacional (USCIRF) conmemora
hoy el segundo aniversario del asesinato de Mahsa Zhina Amini por parte de las
fuerzas de seguridad iraníes por usar un “hijab inadecuado”.
La muerte de Amini
el 16 de septiembre de 2022 desató protestas a nivel nacional en Irán contra
las leyes obligatorias del hijab y otros abusos de la libertad religiosa. Con
la reciente implementación de su campaña Nour, Irán ha intensificado su
violenta represión contra los manifestantes que pacíficamente piden una mayor
libertad religiosa en el país.
“El gobierno de Estados Unidos debería apoyar los esfuerzos
internacionales para responsabilizar a los líderes del régimen iraní por graves
violaciones de la libertad religiosa”, dijo el vicepresidente de la USCIRF,
Eric Ueland. “Instamos a la administración Biden a continuar apoyando a la
Misión Internacional Independiente de Investigación de los Hechos de las
Naciones Unidas sobre Irán y a apoyar una remisión del Consejo de Seguridad de
la situación en Irán a la Corte Penal Internacional para la investigación de
crímenes de lesa humanidad contra quienes afirman la libertad de religión o
creencia."
“Ya es hora de que los funcionarios del régimen iraní que
reprimen a quienes buscan la libertad de religión o de creencias asuman
responsabilidades”, dijo la comisionada de la USCIRF, Susie Gelman. “La
administración Biden debería unificar una coalición de países con ideas afines
para imponer sanciones conjuntas a los funcionarios del régimen iraní cómplices
de las restricciones a la libertad religiosa en Irán”.
En su Informe Anual de 2024, la USCIRF recomendó que el
Departamento de Estado de Estados Unidos vuelva a designar a Irán como “País de
especial preocupación” por violaciones sistemáticas, continuas y atroces de la
libertad religiosa.
Mahsa Amini fue detenida y murió bajo custodia estatal en relación con la vestimenta religiosa impuesta por el Estado.
En septiembre de 2022, la policía encargada de hacer cumplir la moral pública en Teherán arrestó a Amini por no llevar un hiyab "adecuado". Según los informes, la policía la golpeó y la llevó a la comisaría de Vozara. Una vez que llegó a la comisaría, la golpearon de nuevo y luego la trasladaron a un hospital tras sufrir un ataque cardíaco o un derrame cerebral. Según los informes, cayó en coma.
El 16 de septiembre de 2022, Amini falleció en el hospital.
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