EE.UU. dice que delincuencia relacionada con las drogas exige esfuerzo regional

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Por Jeff Baron
Redactor

Washington - Funcionarios de Estados Unidos están prometiendo iniciativas intensivas dirigidas a contrarrestar la delincuencia relacionada con las drogas en lo que se ha convertido en la región más peligrosa del mundo: América Latina.

El secretario de Estado adjunto William R. Brownfield declaró el 31 de marzo ante la subcomisión de Relaciones Exteriores del Senado que las iniciativas se han aumentado particularmente en América Central, que afronta "la amenaza más incipiente en el hemisferio".

"Irónicamente, América Central es víctima del éxito que hemos tenido en Colombia", indicó  Brownfield. "En la medida en que interrumpimos las rutas de envío de narcóticos desde la costa norte de América del Sur, los traficantes desplazaron sus redes al istmo centroamericano. Allí, encontraron instituciones de gobierno débiles y socios dispuestos en las pandillas locales. Toda América Central está atrapada en esta nefasta red de drogas y pandillas".

Al mismo tiempo, agregó, Estados Unidos y México han hecho progresos en el marco de lo que se conoce como la Iniciativa Mérida para atacar a los narcotraficantes que han incrementado enormemente los índices de delitos violentos en México. "A mi juicio, el desafío es brindar suficiente apoyo, equipo y resultados de modo que los ciudadanos en ambos lados de la frontera observen el valor de la Iniciativa y el consenso político bipartidista que la mantiene", explicó Brownfield.

Asimismo, Brownfield advirtió que el progreso contra los narcotraficantes en América Central y México desplazará más de sus operaciones hacia el Caribe. "Ya se ha visto esto en anteriores ocasiones", manifestó. "Nuestro desafío estratégico es el de desarrollar infraestructura en el Caribe que desaliente su retorno".

El senador Robert Menéndez, demócrata por el estado de Nueva Jersey y presidente de la subcomisión, se enfocó también en el apremiante problema en América Central. "Nuestro éxito a través del Plan Colombia, si bien es significativo, no tuvo en cuenta la capacidad del mercado de encontrar nuevas vías para movilizar su producto y nuevos territorios donde infiltrarse", añadió Menéndez. "Sin embargo, el éxito que tuvimos en Colombia mediante la estrecha cooperación bilateral demostró que es posible arremeter contra las organizaciones de narcotráfico y es posible tener éxito. A mi juicio, el plan para la victoria es claro: Nuestras iniciativas han de ser una labor conjunta que reconozca la responsabilidad compartida de afrontar la oferta y demanda de narcóticos".

Vanda Felbab-Brown, una académica en la Institución Brookings que ha estudiado la guerra contra las drogas en Latinoamérica, dijo en una declaración escrita que "con la excepción de Colombia, la actividad delictiva se ha disparado en toda la región". América Latina da cuenta de la mayoría de los secuestros que se producen en el mundo, explicó Felbab-Brown, y los índices de asesinato se encuentran entre los más altos del mundo.

R. Gil Kerlikowske, director de Políticas de la Oficina de Control Nacional de Drogas (ONDCP), señaló que su oficina está elaborando una estrategia integral para el Hemisferio Occidental que haga frente a la demanda, producción y envío de drogas. Al igual que otros, citó a Colombia como un éxito en ciernes. Debido a ese éxito, agregó, la producción de cocaína y heroína se ha reducido drásticamente, y la cocaína que se vende en Estados Unidos cuesta más y es menos pura.